¡Un día de estos termino con este problema!¡me haré un recoge hilos decente!
Y ayer llegó ese día! Me fabriqué uno, sin medidas, sin patrones...tal como iba surgiendo en mi cabeza.
Con un botoncito cogido por una presera es muy cómodo quitarlo para ir a vaciarlo.
A la base le hice un bolsillo, siempre vendrá bien para guardar cualquier cosa que estamos utilizando en una labor, incluso para tener las tijeras a mano.
Le puse esta picunela y estos botones para dejarlo más cuco.
Y no podía faltar un alfiletero. Este además es el que hace que la base sea fuerte y no se resbale cayéndose al suelo. Así que, para que pesara, lo rellené con arena de la playa, aproveché que tengo una botella, por cierto, de mi playa preferida, Las Canteras.
Esta arena es bastante gorda y creo que no se saldrá por la tela.
De esta manera, he escuchado que las agujas y alfileres se afilan.
Y aquí está, esperándome para que me ponga a coser a su lado. Ha quedado de lo más coqueto este recoge hilos.
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Ayer llegó mi esperado pedido que hice por internet.
Se trata de este enhebrador automático.
Me va a venir genial, ya que coso mucho a mano, cada vez que estoy con la colcha del jardín de la abuela, enhebro un centenar de veces la aguja.
Con tan solo apretar este botón ...¡aguja enhebrada!
Gracias por vuestra visita!! Qué tengáis feliz semana!!