Pero bueeeeeno, no sabía yo que esta intriga iba a darme el mayor numero de visitas hasta la fecha. Muchas gracias a todas por compartir conmigo otra aventura más.
Se que muchas conocéis esta técnica de Rag Quilt, pero seguro que otras no. Quiero hacerla llegar a todas y luego que cada una la aplique a su necesidad.
Yo, quise aplicarla para una colcha de cunita, se la voy a regalar a
Hugo, mi nuevo sobrinito. Seguro que le gustará a mi hermana pues ha quedado de lo más agradable y dulce como véis en la foto superior. Las telas las compré en Sevilla en la tienda de patchwork de
Inma Navarro.
Es una técnica muy fácil de hacer, y lo mejor de todo es que es rapidisima por que vas viendo el resultado nada más empezar.
¡Comenzamos!!
Material necesario:
Telas de diferentes colores. )) Yo utilicé cuatro telas distintas, eso es a gusto de cada una, con dos también queda bonita.
Guata.
Tela para la parte de atrás. Yo usé otra distinta, pero si queréis podéis usar la misma que en la parte delantera.
Hilos para coser y acolchar.
Una buena tijera.
Cortamos bloques de todas las telas y de la guata también, a la medida que hayamos decidido, ahora bien, la guata tendrá siempre 2cms menos. La medida que puse a mis bloques fueron de 13x13 cms y de la guata fueron 11x11cms. Yo la hubiera querido hacer de 15x15cms, pero por error en el corte cuando la compré tuve que variar la medida.
Vamos haciendo un sandwich con la tela que queremos en la parte trasera, la guata y la tela de la delantera. Ya os he dicho que podéis utilizar la misma tela por si queréis que os quede el mismo juego de cuadros por un lado y por el otro.
Centráis bien y sujetáis con alfileres en cada esquina.
Pasamos por la máquina cada bloque con el hilo que queramos utilizar para acolchar, yo me decidí por un azul celeste con un brillito muy lindo, y una puntada larguita. Hacemos un pespunte de esquina a esquina, en forma de cruz, sujetando muy bien para que no salgan arrugas. Para ahorrar tiempo, no cortaba el hilo, iban todos los bloques en cadena.
Cuando ya tenemos todos los bloques terminados, empezamos a elegir la colocación segun queramos el efecto de colores o simetría de los mismos. Yo no jugué con nada de esto, iban al azar,simplemente que no me coincidieran dos iguales uno al lado de otro.
En esta técnica lo original es que la costura queda a la vista, más de una vez tuve que descoser, porque estamos acostumbradas a encarar derecho con derecho. Pues aquí no! encaramos parte trasera con parte trasera, y pasamos una costura por el derecho sujetando con alfileres como siempre. Dejaremos un margen de costura de 2cms. Yo cosí dejando justo el ancho del prensatela.
Esto es ya unir bloque a bloque, como sabemos hacer cuando unimos cuadraditos.
Las tiras serán de la medida arreglo a lo que queramos hacer. La mía fue de 8 x10 bloques
Ahora es el momento de dar piquetes en todas la costuras de nuestra tira. Es importante una buena tijera afilada. Sin miedo pero con cuidado vamos dando cortes a cada centímetro más o menos y sin llegar a la costura, a unos 0,5cms.
Vamos uniendo tira a tira siguiendo nuestro gusto o si hemos realizado previamente un boceto.
Según vamos acabando esa unión de bloques y de tiras vamos cortando en el margen de las costuras.
Nuestro trabajo va cogiendo forma, y lo mejor es, que es un preceso corto, pues a la vez que hemos ido cosiendo y uniendo lo vamos acabando, porque ya está hasta acolchado.
Mi colcha va llegando a su fin. Han sido 80 cuadros en total.
Ahora hay que coser un zig-zag alrededor de todo el trabajo. Lo pasaremos con el mismo margen de costura que hemos hecho en todas.
De nuevo y finalmente, damos piquetes a todo el margen que nos ha quedado alrededor.
¿Veis ese cuadrado justo que estoy cortando? Pues así me las tuve que ingeniar para sacar un bloque más, pues de esa tela de florecillas azules, me quedé sin ella por ese fallo en el corte al comprarla. No te queda más remedio que improvisar.!!
La colcha está acabada, nos falta darle el toque final. Ahora veremos cómo. Pero lo que si hay que hacer es sacudirla bien, yo me fui al jardín, y dejé todo de perdido de hilachasssssss...!
Para que todos esos cortes que hemos dado se desilachen y se queden despeinados, hay dos opciones:
Una es despeinar con un cepillito de cerdas todas las costuras. Esta opción la descarté y probé a hacer esta otra.
Sí, sí como veis!
Primero le di un lavadito con un detergente de bebé y suavizante, de una media hora a 30ºC. Y luego la metí en la secadora, algodón y pulsando el botón de delicado. De vez en cuando abría la puerta y veía si estaba completa, jajaja. sólo me faltaba que se hubiera convertido todo en hilachas, je je, pero no, al revés, iba recobrando un tacto super agradable, mullidita y además con el toque que buscaba, los flequitos rizados.
El resultado final es fantástico como podéis comprobar. Así quedó por atrás, pues mi opción fue la de utilizar la misma tela.
Y creo que nos pasa a todas...ummmmh...nos encanta doblar nuestra colcha después de terminada, ¿verdad que sí?
Ahora me queda despedirme de esta labor tan hermosa, pues volará para Las Palmas de Gran Canaria en unos días, en cuanto termine otras cositas que le estoy haciendo a
Hugo.
Esta espero que la disfrute en su cuna y luego, cuando se vaya a su camita que se la ponga de plaid.
¿Qué os ha parecido este tutorial? fácil de hacer seguro, lo demás ya me gustaría que cada una me lo pusiera en un comentario je je. ah! y perdonad por la intriga, que creo... que no ha sido muy larga!!
Una vez más, he disfrutado un montón haciendo este trabajo.
Muchas gracias a todas por estar aquí conmigo.
Un abrazo